4º Dìa de Pràcticas

Jueves 28 de febrero 

Hoy me toco cubrir la guardia de la entraba en la que tuve la oportunidad de conocer más niños de otros salones. Observe niños muy correctos que me decían buenos días, otros niños serios, unos entrando con mucho entusiasmo y contentos, otros enojados, otros con temor y miedo, etc. fue bonita experiencia porque conocí niños que expresaban muchas cosas y que muy pocas veces tomamos en cuenta.

Regrese al salón y los niños estaban en clase de música. Realmente llegue al finalizar la clase, me tocó ver muy poco, pero con lo poco que vi me di cuenta que el maestro es muy bueno y que realmente está enseñando música, porque enseñaba las notas musicales y para ser de primero los la mayoría de mis niños ya manejaban las notas y los instrumentos musicales y los identificaban bastante bien.

Se continuó con dos horas de trabajo personal. En donde ya me sentí mejor y con más seguridad para evaluar a los niños, en ocasiones si pedía a la maestra que fuera ella, porque aún me faltaba cosas por entender. Se dio la hora del loch y una vez que terminaban se dirigían a la línea amarilla.

Una vez que todos los niños habían terminado la maestra los prepara para mi intervención diciéndoles que yo les iba a enseñar algo bien interesante y que era importante que me pusieran atención, los niños se veían interesados y continúe con mi intervención. Inicie principalmente utilizando unas imágenes de los números que les pegue en el pizarrón y preguntando que si alguna vez habían visto los que estaba dibujado en las imágenes a lo que me respondieron que sí, enseguida les pregunte que si sabían cómo se llamaba lo que yo tenía en las imágenes a lo que me respondieron que números, los felicite por respuesta pidiéndoles un aplauso. Continúe contándoles que había descubierto algo bien interesante y que quería compartírselos, los niños atentos me dijeron que que era y les dije que así como nosotros teníamos un nombre, cada uno de los números tenía su nombre, les pedí que me ayudaran a decir el nombre de los números intercalándolos con nombres de ellos mismos para que se dieran cuenta “de mi descubrimiento”, los felicite por su participación. Enseguida les mostré 5 cajas de colores y les pedí que a cada una me ayudaran a asignarle un número, una vez que lo hicieron, les explique que iban a elegir a un niño para que colocara dentro de la caja el número de objetos que pedía, hubo niños que se lo hicieron correctamente y niños que se equivocaron. En ambas utilice la ayuda del grupo para confirmar o para rectificar si se equivocaron. Continúe diciéndoles que también podíamos hacer movimientos con el cuerpo que podíamos contar, y empecé a indicar movimientos contando como saltos, vueltas. levantar pies, etc. Les pedí que se acercaran conmigo para explicarles una actividad que iban a elaborar al día siguiente porque ya no íbamos alcanzar a realizar, la cual iba a consistir en una hoja didáctica que tenía los números del 1 al 5 en la que se le iban a pegar la cantidad de stickers que les correspondiera a cada número. Les agradecí por su participación y los formamos para irnos al recreo.

Al regresar les toco clase de inglés en la que estuvieron cantando varias canciones para reforzamiento de conceptos.

Se dio la hora de salida y nos fuimos a las bancas a esperar a los papás.

Reflexión de mi clase: Me falto más control del grupo, porque si hubo un momento en el que perdí la atención de los niños, y en la que perdí tiempo. Me falta jugar más con mis tonos de voz, que es lo que observe que utilizan mucho mis maestras, me falto más movimiento personal a la hora de dar la clase y creo que me falto un cierre más aterrizado y estar más al tanto del tiempo invertido en cada etapa de la secuencia de actividades.